Los pasados 5 y 6 de mayo dos integrantes del equipo de cría en cautividad de Grefa se desplazaron, una vez más, hasta el tranquilo pueblecito de la costa oeste francesa, Saint Denis du Payré. El motivo del viaje, recoger a tres pollos de Águila de Bonelli nacidos allí y trasladarlos a nuestro Centro en Majadahonda, para posteriormente ser reintroducidas en el medio natural en Navarra dentro del marco del LIFE Bonelli (Mallorca, Madrid, Navarra o Álava) iniciado en 2014. Hace muy poquito procedimos a retirar otros dos pollos de Christhian que ya están con otros cuatro en su nido artificial en Madrid.
El martes por la tarde, después de diez horas de viaje y casi 1000km recorridos, nos recibía en su casa Christian Pacteau. Este amigable francés,integrante de la LPO (Ligue pour la Protection des Oiseaux), colabora con GREFA, y paticipa en el Life Bonelli, desde hace varios años criando en cautividad Águilas de Bonelli y cediéndolas para los programas de reintroducción y reforzamiento españoles. Este año nos recibe particularmente contento, y nos muestra orgulloso sus resultados. Nada menos que diez pollos de Bonelli ha conseguido sacar adelante esta temporada de cría de 2015. Como ya hemos comentado, dos de estos pollos ya fueron recogidos y trasladados a GREFA en una expedición anterior y después de ser examinados, anillados y marcados con transmisor GPS se introdujeron este mismo lunes 4 de mayo en un hacking de la Sierra Oeste de Madrid junto a otros cuatro compañeros de Andalucía.
El miércoles de madrugada, con los tres pollos cómodamente instalados en nuestro vehículo nos dispusimos a emprender el largo viaje de regreso. Allí dejamos a nuestro amigo Christian, dedicado al laborioso cuidado de los 5 pollos restantes y de todas sus parejas reproductoras. Esto nos demuestra una vez más que todavía quedan personas, que al igual que nosotros, le profesan una gran dedicación a esta emblemática especie, ahora tan necesitada.
Nada más llegar a GREFA los tres pollos fueron revisados por los veterinarios y, después de recogidas las muestras necesarias, ya se encuentran acomodados en un nido de nuestras instalaciones de cría, alimentados incansablemente por una pareja de Águilas de Bonelli nodrizas. Cuando alcancen la edad adecuada serán, como todos sus “hermanos”, marcados con transmisores satélite, liberados por el método de hacking y sometidos a un riguroso seguimiento de sus primeras etapas de vida.
Muchas gracias por todo Christian; por tu hospitalidad, y sobre todo, por tu pasión por el Águila de Bonelli y todo tu tiempo y esfuerzo dedicados a la recuperación de esta especie gravemente amenazada y que tanto nos quita el sueño a todos.