Las águilas de Bonelli nos siguen sorprendiendo con sus desplazamientos repentinos a larga distancia. Esta vez ha sido "Dueña", que recientemente y en poco más de diez días ha realizado la friolera de más de 1.300 kilómetros, lo que le ha permitido llegar a las Rías Baixas (Rías de Vigo y Pontevedra) y retornar a su punto de partida.

Es oportuno recordar aquí que "Dueña" es una hembra nacida “silvestre” en 2015 en la provincia de Toledo, cerca ya del límite con la Comunidad de Madrid, y que fue marcada en su propio nido la pasada primavera. Gracias a los datos enviados por su emisor sabemos, gracias al seguimiento realizado por GREFA, que este ejemplar había realizado una pequeña dispersión hacia las provincias de Ciudad Real y Albacete, pasando la mayor parte del tiempo en la de Cuenca.

Desde este mes de marzo todas las águilas marcadas en el marco del proyecto LIFE Bonelli han activado sus movimientos, pero nos ha sorprendido que este ejemplar en concreto haya realizado un viaje impresionante en cuanto a longitud, velocidad y época.

No es el primer ejemplar marcado de águila perdicera que elige como destino la provincia de Pontevedra. El último que lo realizó fue “Turón”, previamente a su viaje por tierras portuguesas, andaluzas y por último africanas.  A pesar, de tener origenes distintos y de llevar caminos distintos llegaron al mismo punto, la naturaleza no deja de sorprendernos.  Posiblemente este relacionado con los viento dominantes y que las águilas se dejan llevar hasta que llegan al  Océano Atlántico, barrera infranqueable. Dos bonitos y similares viajes que realizaron dos de nuestras águilas marcadas con emisores, una nacida en un nido silvestre de la provincia de Toledo y la otra liberada en el proyecto de Reforzamiento del Life Bonelli en Madrid.

Tweet

Share