El pasado 4 de marzo se celebró en Mallorca el Día del Águila, un evento anual asociado al proyecto LIFE Bonelli, destinado a la recuperación del águila de Bonelli o águila perdicera. Unas doscientas personas participaron en los talleres, charlas y demás actividades organizadas con motivo de esta celebración, con la que se pretende trasmitir a los ciudadanos la importancia de conservar a esta especie y otras aves rapaces e involucrarlos en este objetivo.
El Día del Águila 2017 se celebró en la finca Raixa, de propiedad pública y situada a los pies de la Sierra de Tramuntana, en el término municipal de Buñola. Declarada Bien de Interés Cultural, Raixa acoge el Centro de Interpretación del Paraje Natural de la Serra de Tramuntana. Entre los asistentes estaban el Sr. Miguel Mir y el Sr. Sebastià Sansó, Director General de Espacios Naturales y Biodiversidad y Director de Educación Ambiental del Gobierno de las Islas Baleares y el Sr. Josep Manchado, Director Insular de Medio Ambiente del Consell de Mallorca. También estuvieron presentes representantes de los ayuntamientos de Buñola y Valldemosa y de diversas instituciones como ICTIB, Red Eléctrica Española y asociaciones de cetrería.
La jornada comenzó con talleres infantiles de chapas, máscaras y móviles de águilas de Bonelli, en los que participaron unos sesenta niños. A continuación dio inicio la charla divulgativa sobre el águila de Bonelli y el proyecto LIFE Bonelli y facilitada por la Directora Técnica del Proyecto en Mallorca, Sra. Carlota Viada, a la que asistieron unas cincuenta personas. El siguiente acto fue la entrega de diplomas a los nuevos miembros de la Red de Apoyo a LIFE Bonelli, que en esta ocasión fueron:
Por otra parte, este año se escogieron dos padrinos de LIFE Bonelli: la Cooperativa Payesa de Pollença y la Cooperativa Agrícola Sant Bartomeu de Sóller. El planteamiento a la hora de escoger a los padrinos ha sido que las águilas y los payeses gestionan y viven en el mismo territorio. Sin olivares, sin zonas abiertas de pastoreo, sin las presas que tienen como hábitat los terrenos agrícolas o ganaderos, hoy en día no podría haber águilas. Por todo esto, el proyecto quiere hacer un homenaje a las personas que hacen de la gestión agrícola su vida, los agricultores y ganaderos, en este caso de la Sierra de Tramuntana, pero en realidad de toda Mallorca.