"Garballó" y "Elmo" son los nombres de dos machos de águilas de Bonelli pertenecientes a la población de la especie en la isla de Mallorca que han muerto recientemente en tendidos eléctricos, en el primer caso debido a una electrocución y en el segundo por colisión. El COFIB e IBANAT (Govern de les Illes Balears) gestionaron el levantamiento de los dos cadáveres por parte de los Agentes de Medio Ambiente, así como su necropsia, que confirmó la causa de la muerte de ambos ejemplares. Estas acciones están incluidas en los compromisos post-LIFE BONELLI que ejecuta el Govern de les Illes Balears.
"Garballó", ejemplar nacido en libertad en Mallorca en 2017 de la pareja formada por la hembra "Vent" y el macho "Bel", murió electrocutado el pasado 10 de noviembre en su área de dispersión. Esta electrocución se produjo en un tendido privado, cuya corrección es más complicada que los que son propiedad de Endesa, ya que el Gobierno balear mantiene un acuerdo con esta empresa para la corrección en sus líneas eléctricas de los apoyos más peligrosos para las aves.
Más grave aún ha sido el caso de "Elmo", un macho reproductor, emparejado con "Escorca". "Elmo" fue el progenitor de un águila de Bonelli que algunos recordaréis, "Gorg", conocido en su momento como el pollo de los tres récords [https://goo.gl/UxmjSN]. Pues bien, "Elmo" ha muerto por colisión con un tendido eléctrico un día de fuertes vientos en la isla. Este tendido es especialmente peligroso y en él han caído ya un total de cuatro águilas de Bonelli electrocutadas (una de ellas "Estepona", la primera pareja de "Elmo"). Ahora que este tendido estaba perfectamente corregido, aparece el problema de la colisión, por lo que habrá que instalar dispositivos salvapájaros en los cables.
Se da la circunstancia de que hasta ahora había un buen equilibrio de machos y hembras en la población mallorquina de águila de Bonelli. Sin embargo con las últimas bajas de machos ("Galatzó", "Garballó" y "Elmo") y teniendo en cuenta que las últimas liberaciones son de hembras ("Gandía" y "Grazalema"), esta tasa se ha desequilibrado.
Actualmente hay veinte águilas de Bonelli en Mallorca y otras seis desaparecidas. En total, hay seis parejas territoriales, más "Escorca", que está viuda pero mantiene su territorio. Además hay seis hembras no emparejadas frente a un solo macho no emparejado. Sabemos por observaciones realizadas que hay más águilas (de las seis desaparecidas algunas son territoriales y habrán criado). Por lo tanto confiamos en que tanto "Escorca" como las seis hembras "solteras" atraigan a algún macho "no controlado" de los que hay por la isla.
Confiamos también en que la temporada reproductora en 2018 aporte machos a la población mallorquina de águila de Bonelli. En el caso de que sigan siendo escasos habrá que plantearse la liberación de machos extra cuando sea posible.